sábado, 29 de mayo de 2010

Hacia un nuevo horizonte...

Debo admitir que últimamente no dejo de pensar en este blog.

Este blog lo fue todo para mí - fue mi primer blog "serio", fue mi exploración de mis límites dentro y fuera del anonimato, y fue en total una experiencia que no olvidaré nunca.

Pero como ya se ha notado, debido a que mi última actualización fue hace dos años, fue una exploración que probablemente ya terminó.

Invito a cualquier lector que pueda pasearse por aquí a leer mi nuevo blog - actualizado levemente más seguido - llamado Drabbloom. Quizás ya no son las dudas existenciales que eran antes, pero puedo leer algo de Flor de invierno y compararlo inmediatamente con algo de Drabbloom. Sigo siendo el mismo.

Y ahora que estamos en esto puedo mencionar que, aunque me he referido a mí mismo en masculino a lo largo de la vida de este blog, no soy ni tengo deseos de ser hombre. Era sólo un interés por desatarme tanto como me haya sido posible de quien soy en realidad.

sábado, 28 de junio de 2008

Y algo que susurró la nieve...

¿Por qué guardamos secretos?
Indudablemente, la razón más simple pero además popular sería "No quiero que la gente se entere."
Pero, ¿hay una razón en especial?
Si sientes, piensas o te ha ocurrido algo entonces no hay razón para no querer admitirlo. La verdad ha sido creada para ser conocida, las mentiras para ocultar y se oculta para no admitir.
Pero si no admitimos, ¿qué?
¿Vamos a ocultarnos tras "No sé", "No es verdad" y "No sé de qué me hablas"?
Las mentiras se relacionan estrechamente con los secretos, pero ahí queda un punto más:
¿Cuál es peor?

jueves, 19 de junio de 2008

¡Pero nada ya va a cambiarnos!

¿Si de pronto quisiéramos cambiar todo?
Nadie me controla, nadie es mi dueño. Es mi libertad, de vivir voluntad.

¿No crees que un gran cambio sería un desastre para todo?
Es decir, la sociedad actual, lamento ser pesimista, es un desastre.
Y con un cambio mínimo...
Como una torre de los famosísimos legos...
Quitamos la parte de abajo... y cae.

miércoles, 11 de junio de 2008

Y si...

¿Y si tuvieras una oportunidad para obtener lo que más deseas?
¿Y si estuvieras tan cerca de lograrlo que casi pudieras sentir la victoria?
¿Y si pudieras casi tocarlo con la yema de los dedos?
Pero...
Si estás a pundo de alcanzarlo...
¿y desaparece?

¿Y si tu sueño se convierte en pesadilla?
¿Y si pierdes todo lo que quieres?
¿Y si pierdes la razón para buscarlo?
Es decir...
Si a fuerza del sentimiento...
¿dejas de sentir?

jueves, 29 de mayo de 2008

Pide un deseo

(Imagen de lullacrie.deviantart.com)

Si pidieras un deseo, ¿cuál sería?
Si tuvieras cualquier cosa al alcance... cualquier cosa... lo que sea...
¿Qué sería?
¿Amor?
¿Dinero?
¿Fama?

No es necesaria una encuesta para saber la respuesta.
Dinero.
Seguido de cerca por fama y luego amor quizá, pero en definitiva, dinero es el primero.
Pero no puedo evitar preguntarme.
¿Qué es un deseo?
Desear vendría a ser pedir algo que se anhela.

Voy a agregar algo que quizá ayude a entender mejor mi punto.
¿Qué tan lejos llegarías para cumplir un deseo?
Si deseas, si quieres algo realmente con mucha fuerza, ¿de cuánto es capaz un ser humano?
¿Matarías por amor?
¿Robarías por dinero?
¿Traicionarías por fama?
¿Deseas?

miércoles, 28 de mayo de 2008

Y los copos de nieve ya van a caer..

El atardecer
El calor se lleve
Y los copos de nieve
Ya van a caer

Un crudo invierno
Esperó paciente
Mas insistente
Cual infierno

La flor regresa

Aunque no haya nieve donde vivo ni sea invierno, me parece que es un buen tiempo para abrir Flor de Invierno otra vez.

(Este post me tomó exactamente 33 minutos en escribir.)

sábado, 1 de marzo de 2008

Toda flor nace de una semilla y al morir volverá a nacer...

Van dos o tres meses desde que comencé este blog, Flor de Invierno, y aunque no he puesto demasiadas entradas últimamente (o en total), las pocas veces que he escrito algo me he dedicado enormemente a ello, y, aunque quizás nadie lea esto jamás, siempre estaré orgulloso de todo.
Hubieron muchas cosas extrañas, lo sé, desde el cambio repentino de los nombres de las entradas y algunas ediciones leves en las mismas (ambos por razones personales) hasta mi cambio de apodo repentino (y ruego que mi apodo anterior no sea revelado) y el hecho de que nunca me he descrito con un género preciso.
Son estas ambigüedades que, a mis ojos, hacen que este blog sea bello: Los cambios, menores o mayores, no afectan mi manera de pensar, y pienso que eso no debería ocurrir sólo conmigo.

Hasta la flor más resistente
Muere al final
Pero fue la más valiente
Durante el frío invernal

Toda flor renace después
Así que no te sorprendas con lo que ves
Quizás la Flor de Invierno vaya a volver
¿Quién podría saber?

Ahora la nieve se ha ido
Todo árbol ha florecido
Y con la luz matutina
Aquí se despide Neblina

Me despido así, quizás para bien, quizás para mal, pero no para siempre.